Qué culpa tiene la bendición perruna
Máxima Casa de Estudios.- Si eres de ese tipo de neo-familias posmo sin popote y deconstruidas que piensan que una mascota es como un bebito al que hay que cuidar, vestir, sacarlo en su carriola, ponerle su gorrito y su ropita, etc., pues déjanos decirte que ya le bajes dos rayitas a tu comportamiento tóxico.
Ylenia Márquez, académica de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM dijo para un boletín de dicha Universidad que debes ser más responsable al momento de tener una mascota, pues una compañía perruna o gatuna implica comprometerte unos catorce años o más de cuidarlos, y nada de que ya no te gusta y los echas a la calle.
Pero tampoco es enfermo hacer lo contrario y convertirte en padre sobreprotector de tu perrhijo (eso de hacer perrhijo a tu perro no es nada sano), por lo que sí debes ponerle todas sus vacunas, desparasitarlo, pero no por ello debes humanizarlo y creer que tu perro es una persona.
“Como parte de este concepto de tenencia responsable, también debemos evitar tratarlos como humanos, es inadecuado y hasta cierto punto irrespetuoso. A un perro o gato se le debe dar su lugar como tal, respetar su calidad de animal, lo que implica mordisquear, rascar o arañar; es su comportamiento nato”, dijo la académica para el boletín de la UNAM.
Así que ya deja de andar de irrespetuoso con el Milaneso y permítele vivir perrunamente. Que si ya mordió el zapato o ya lambió el tapiz, pues ni modos, es un animal alegre y eso es lo que hace perro al perro.