#TodosSomosPedroPablo
Tepito.- Un joven de 22 años se enteró que iba a ser padre y de la emoción se tatuó el nombre de su futura bendición. Para su desgracia, por andar de metiche en el celular de su mujer, Pedro Pablo Santo Domingo (neta así se llama, que manchados sus papás, ¿no?) se enteró de una terrible verdad.
Bien dicen que te tatúes lo que quieras, menos el nombre de alguna persona, aunque sea tu hijo. Este es el caso de Pedro Pablo, que se rayó un “Benjamín” gigante en su espalda en memoria a su baby que aún no nacía.
Luego al parce se le salió lo Badabundero y empezó a revisar el celular de su pareja, al mero estilo de Lizbeth Rodriguez. Para su sorpresa, se topó con mensajes de su ex donde la chava le decía que se moría por regresar con él.
Por si fuera poco, el pobre y destrozado hombre siguió leyendo la conversación sólo para darse cuenta que el hijo que estaba esperando no era de él, sino del ex. Cuando nació el bebé hicieron una prueba de ADN, que sólo reveló lo que ya dijimos arriba.
Bien pedo, bien loco y cantándole al recuerdo, Pedro Pablo le reclamó a su novia del engaño y comenzó a destrozar la casa de su novia, hasta le pegó con un palo. Los vecinos solicitaron apoyo de las autoridades colombianas, que detuvieron al parce.
Los policías al enterarse de la historia, dejaron en libertad al colombiano y hasta le ofrecieron llevarlo a terapia porque pues, qué feo que tu morrita te cambie por alguien más, ¿no?