Detenme Dios, porque no respondo
Inglaterra.- La boda real entre Meghan Markle y el Príncipe Harry se llevó a cabo la semana pasada, y el resumen que les podemos dar es que todo estuvo muy mono, muy elegante, lleno de sombreros bonitos y joyas, gente blanca y rostros felices porque dinero, mucho dinero, poder y monarquía.
Pero quien se llevó las miradas de los expertos memeros e intrigosos de Sanborns fue la ex de Harry, Chelsy Davy, la misma de ayer, la incondicional, la que no espera nada, e invitada a la boda para demostrar que allá son MUY civilizados.
Pero no todo en la boda real fueron sonrisas ensayadas y aplausos a medias, también presenciamos el momento exacto en el que Chelsy contuvo toda su ira después de que su ex hombre con billetera interesante contrajera nupcias con ¡OTRA!, ¡en su cara!, ¡a nivel mundial!
Aquí el momento exacto en el que se le rompe en corazón
Y te preguntarás ¿qué clase de persona sin alma invita a su ex a su boda, o, qué tipo de ex sádico contestaría que sí a dicha invitación?, también ¿por qué nos resulta tan hipnotizante mirar ese profundo, muy profundo dolor que se sustenta en el “esa pude haber sido yo, ¿por qué diosito, pol khé?”