“Hay que ser muy disciplinado para lograrlo”
Villa Glucosa.- La Asociación de Gorditos y Comelones Habituales ha descubierto un infalible método para combatir la ansiedad crónica, la cual es padecida por casi un tercio de la población mexicana.
Se trata de una terapia consuetudinaria de ingerir alimentos entre comidas para mandar mensajes al cerebro con la finalidad que éste no piense en la depresión ocasionada por irle al Cruz Azul o la desaparición de la Coca de Vainilla.
“Lo importante es no darle oportunidad al cerebro de pensar cuando uno está triste“, reveló el director de la asociación mientras movía con lentitud sus manos.
El estudio será publicado en breve, y contendrá una lista de bocadillos ideales para combatir la ansiedad y depresión para que los usuarios puedan seguir puntualmente las recomendaciones en él explicadas.
“Yo vivía infeliz, hasta que descubrí lo que un pingüino puede hacer por mí justo entre el desayuno y la comida”, confesó uno de los voluntarios que fueron usados para el estudio, y quien en sólo un par de meses, ha subido 12 kilos, acercándose a la meta de autoestima por él propuesta.
Además de la merienda y los bocadillos ocasionales, los snacks son otra buena idea para mantener el cerebro óptimo y alejado de ese rompimiento amoroso, y de los peligrosos gimnasios.
“No se trata de que se atasquen a la hora de comer, sino echarse un antojito siempre entre comidas. Así llega uno a la cena satisfecho de haber tenido un día pleno”, sugirió el mismo encargado del estudio.