1. Además de olor
Colina de los inodoros.- Cuando se trata de usar un baño público en lugar del trono en tu casa, hay diferencias sútiles que nos hacen desear la muerte o quedarnos un rato más con vida. A continuación, te presentamos esa delgada línea separa a uno de los terrenos más espirituales del ser humano con el peor círculo del infierno de Dante pero multiplicado por π.
1.- En el baño de tu casa, no hay un tipo al lado liberando aliviado las enchiladas y haciendo ruidos escatólogicos. Paz absoluta.
2.- En el baño público, usas más papel para cubrir los restos calientes del anterior usuario, lo que no te importa, porque el papel llegó ahí de manera gratis.
3.- En tu casa puedes cantar mientras evacuas; en el público también, pero tu canto será interrumpido por una mentada.
4.- En ninguno deberías llevar alimentos contigo, pero en tu casa te sientes con la tranquilidad de entrar hasta con un tamal
5.- En el baño público no está tu novia bañándose en la regadera mientras “coincidió” que tuviste “ganas de entrar”.
6.- En tu casa puedes retocarte el cabello en el espejo sin que haya un lépero al lado viéndote.
7.- El baño de tu casa huele a rosas aún después de tú haber ido; en el público apesta a los excrementos horribles de otro.
8.- En tu casa no te tienes que agachar antes de entrar para ver si hay zapatos con los pantalones abajo.
9.- En ninguno hay límite de tiempo, pero en el público sentirás la presión de los pies de alguien afuera.
10.- El seguro social cree que el baño público es un buen lugar para que te tomes la muestra para el conteo de espermas después de tu vasectomía.
11.- Uno de los mayores placeres de la vida es ir al baño y luego meterse a bañar, pero esto no lo puedes hacer en el baño del centro comercial.