También se dejó un bigotito de Dalí para parecer barbero
Club de los no lampiños.- Un peluquero de barrio empezó a usar un mandil de piel en su negocio y ahora ya cobra el triple por cortar el cabello de sus clientes.
Las tarifas del localito se elevaron súbitamente luego de que el sujeto decidiera usar el mandilito el cual acompaña con una boina que lo hace parecer enigmático y experto en lo que hace.
Les presento mandil para barbero o estlista pic.twitter.com/evMNfLoL2p
— Martin VIEYRA (@Martin00948749) January 28, 2021
“¿Y tú dónde estudiaste para ser barbero?”, preguntó un cliente asiduo quien ahora siente más respeto por el barbero que también fue tatuador.
“Pues en una academia, pero me especialicé en torneos”, replicó el peluquero con cuadros de James Dean y Hugh Jackman en las paredes.
El peluquero ya alejó a todos sus clientes habituales
Para ir con el estilo, el sujeto se dejó un bigotito tipo Salvador Dalí que va perfecto con su nueva faceta de mamador barbero profesional y neohipster anarquista.
“Me quería poner moñito en el cuello, pero se me hace que ya me vería ridículo”, opinó precavido el emprendedor.
Los nuevos precios del negocio han alejado a sus clientes habituales, incluyendo varias señoras que llevaban a sus bendis a que les cortaron el cabello como el vato que no les cumplió.
“Yo antes iba a que me diera una despuntadita, pero ya se volvió loco el vato”, sentenció un cliente quien vio como el peluquero antes hasta era su amigo, y ahora apenas si lo saluda.
Neta cada día qué pasa siento que estoy haciendo lo correcto, por cierto parezco profesional con mi mandil de barbero. pic.twitter.com/uk9OH0Tw8W
— Aʀᴀɴ̃ᴀ Vᴇʀɢᴀs.™ (@SAVCK20) November 5, 2019
Y por si acaso se te pasó: una mujer le regaló un trío a su esposo de aniversario y la otra chica fue la que terminó embarazada de él.
Importante: Recuerda que El Deforma es un sitio de entretenimiento, humor y sátira. El contenido en nuestras notas NO debe de ser tomado como una fuente real de información aún cuando algunos elementos de la nota sean parte de la realidad. La única sección en donde el contenido de las notas es 100% real es en “Increíble pero Cierto.