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Son bluetooth: Ponen columpios públicos en Ecatepec y ya se los robaron

Casi dos días duraron

Barrio de la esperanza.- En Ecatepec habían puesto unos columpios en un parque público, y pues a los dos días ya se los habían robado.

Cuando vemos un video de columpios, nuestro mayor temor es que éstos se muevan solos, pero parece que ese tipo de cinemática de terror sí puede ser superada cuando ya ni siquiera hay columpios.

La dramática historia fue narrada por un lugareño quien justo comienza la secuencia de su video denunciando que se habían robado unos columpios que habían colocado “apenas el domingo”, en tanto dejaba en claro por su acento que sí es en efecto, habitante de Ecatepec.

“Hijos de toda su rep*ta madre, se llevaron los columpios, y apenas los habían puesto el domingo”, se le escucha decir al sujeto quien no entiende mucho de modulación ni de horarios infantiles.

Conforme va grabando los alrededores, podemos constatar que en efecto, todos los juegos para niños que habían puesto, han desaparecido como un recordatorio de que tenemos que tener esperanza en la humanidad.

En un segundo video, el mismo sujeto vuelve a grabar el lugar corroborando que por arte de magia, los columpios habían “regresado”, al tiempo que exclama “el pueblo se manifestó”; todo esto mientras vemos a su acompañante “estrenándolos” con una sonrisa de oreja a oreja.

@demuseldemonio
Graciss ya colocaron ptros para el kilo. No se los lleven. No sean cabrones♬ sonido original – DEMUS EL DEMONIO

Los columpios había desaparecido como por arte de magia

A falta de cámaras de seguridad que nos podrían dar una imagen de más o menos cómo se dieron los hechos, esta podría ser una recreación exacta de cuando algún valioso residente de la zona al ver que habían colocado juegos para el uso de la comunidad, él decidió cortarlos para llevárselos al patio de su casa, donde jamás serían colocados sobre la reja y terminarían siendo vendidos por kilo. A lo mejor por eso los devolvió finalmente…

 

Para leer más: un restaurante vegano tuvo que empezar a vender platillos de carne para no quebrar.

Adolfo Santino