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Congruencia nivel: madre vegana se niega a quitarle los piojos a su hija para no hacerles daño

Habemus “madre del año”

Cantón Anémico.- Una mujer vegana no le quiere quitar los piojos que le salieron en el cabello de su hija que porque no los quiere lastimar.

La historia fue contada por la vecina de la susodicha, quien explicó en un blog que la hija de la mujer tiene liendres pero que ésta se niega a hacer algo porque eso significaría “matar a un ser vivo”.

“Mi hija de siete años es la mejor amiga de la chica de al lado, cuya familia es vegana. Eso está bien; respetamos su elección e incluso hacemos comida especial cuando la pequeña River viene a jugar. Mi problema es que recientemente esta niña encantadora estaba en nuestra casa y se rascaba furiosamente… y descubrí que estaba plagada de piojos”, explicó la mujer originaria de Australia quien tendrá que prohibir que su propia hija vaya a la casa de enfrente a jugar con la niña infestada de piojos.

Esta mujer vegana ya está nominada a “Madre del año”

Y es que como ellos mismos se encargan de decirlo cada 15 minutos, los veganos no solo no consumen ningún producto derivado de los animales (incluyendo huevo, miel, piel para las prendas de vestir y por supuesto, carne), sino que según ellos, todas sus acciones están encaminadas a evitar el “maltrato” de algún ser vivo, en este caso, los piojos.

“Para mi sorpresa, esta mujer dijo que no solo sabía sobre la condición de su hija sino que se negaba a hacer algo al respecto. Los veganos no matan ningún ser vivo, esa es la razón”, agrega la vecina que subió la historia al ciberespacio para que todo el mundo se enterara de lo cuerdos que están estas personitas.

“Le peino los piojos y las liendres en el jardín donde tienen una oportunidad de sobrevivir”, habría replicado la activista quien nunca ha oído de los pesticidas que le echan en los campos de cultivo de la soya y las almendras que se come.

“No es vegana, es gilipollas“, “Ese pensamiento es producido por una grave desnutrición que afecta el cerebro por falta de nutrientes”, “Por favor que le quiten a la niña de su cuidado”, fueron tan solo algunos de los comentarios que se pueden leer en la publicación.

Por si te lo perdiste: el autor del libro “Padre Rico, Padre Pobre” confesó que debe más de un billón de dólares.

Adolfo Santino