Que se le olvidó su asador y sus discos de Miranda en su casa
Patagonia del Cinismo.- El Tata Martino ya está de vuelta en México y así le fue con los aficionados que fueron a “recibirlo” al aeropuerto.
Tras el rotundo fracaso de la Selección Nacional, muchos aficionados (por no decir, todos) han culpado al estratega argentino del papelón que se aventó el equipo en Qatar, y por fin llegó el día en el que el Tata volvió a nuestro país; y como era de esperarse, los aficionados lo increparon en el aeropuerto.
INCREPARON AL TATA MARTINO AL LLEGAR A MÉXICO
🚨🚨🚨🚨🚨🚨🚨Así le reclamó un aficionado al entrenador de la Selección Mexicana tras el fracaso en #Qatar2022
📽️ @FabrizioDC_ pic.twitter.com/7M3WdcI8om
— W Deportes (@deportesWRADIO) December 4, 2022
“Nomás viniste a robar, nomás a eso. Pero te aferraste…”, le dice un aficionado a nombre del resto de los mexicanos censados por el INEGI.
A su llegada al aeropuerto de la Ciudad de México, ni el Tata ni su cuerpo técnico quisieron hablar con la prensa, y ante los reclamos de la gente, éstos optaron solo por seguir avanzando rogándole al Dios de la Patagonia que la camioneta que los iba a recoger ya estuviera esperándolos.
El Tata se atrevió a regresar a México como si nada hubiera pasado
Las escenas de la llegada del estratega argentino no estuvieron exentas de tensión, pues incluso en algún momento, alguien del cuerpo técnico de Martino le da una “cachetadita” a un reportero, quien de inmediato lo acuso con un “Ah, ¿me estás golpeando?”, a lo que el otro sujeto contesta con el acento más gaucho posible.
TENSIÓN A LA LLEGADA DE LA SELECCIÓN MEXICANA AL AICM
🚨🚨🚨🚨🚨🚨Scopponi se encaró con un aficionado y le dio unas palmadas en la cara, al hincha no le gustó… ¡Y todo ante las cámaras! 😱
📽️ @FabanReyes pic.twitter.com/MIWBKfXnva
— W Deportes (@deportesWRADIO) December 4, 2022
Lo único rescatable de todo esto es que el mismo Tata ya confirmó que su ciclo al frente de la Selección ya había terminado a pesar de que todavía tenía contrata vigente, y parece que solo volvió a México para empacar sus cosas e irse de vuelta a la Pampa a recibir una condecoración del gobierno argentino.
