Kiev sin costa.- Un sujeto se quiso salvar de una multa de tránsito diciendo que era un refugiado ucraniano y pues por la forma en cómo toma, a lo mejor sí lo era.
El conductor que venía en completo estado de ebriedad fue detenido por unos agentes viales quienes se percataron de la forma en cómo venía, pero cuando le pidieron que bajara del automóvil, él solo decía que “venía de Ucrania” para intentar salvarse del multononón que le esperaba.
Esto sucedió en las calles de La Paz, en Bolivia, donde al parecer el gobierno está recibiendo muchos refugiados que vienen huyendo del conflicto… y de las playas.
“¿Señor, usted es de La Paz, de aquí… de qué lugar es?”, lo confronta una periodista que se acercó al lugar donde lo detuvieron.
“¡De Ucrania! He venido de la guerra”, contesta de inmediato el sujeto con ascendencia eslava.
A pesar de la “historia” del individuo, los policías insisten en que baje del vehículo pues evidentemente no podía ni debía conducir en ese estado.
Para acabarla de amolar, los pasajeros con los que venían, iban igual o peor que él, por lo que asumimos que venían de una fiesta. Tal vez, alguna comitiva de bienvenida que les dieron a los ucranianos que andan pidiendo asilo en Bolivia.
Al ver que los oficiales no le creyeron su historia, él sujeto cambia su versión y esta vez se convierte en abogado, como si hubiera una dispensa especial para que los leguleyos puedan manejar en estado de ebriedad.
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CLONADAMENTE CIERTO
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