Paraíso Problemático.- Simpatizantes de Morena recibieron con huevazos y tomatazos a Mario Delgado, líder nacional de dicho órgano político.
Esto durante un evento en Gómez Palacio, Durango, cuando el dirigente fue a entregarle constancia como precandidata única a Marina Vitela, quien será la abanderada de Morena para la gubernatura de dicha entidad.
Mientras Delgado presidía la ceremonia, un centenar de personas le abucheaban y le gritaban “corrupto y traidor”, en tanto que afuera del Club de Leones donde tuvo lugar el evento, otros tantos gritaban “Enríquez, Enríquez” como muestras de apoyo a José Ramón Enríquez, quien muchos morenistas consideraban era la mejor opción para ser su candidato.
Mientras ocurría la rebatinga, Delgado invitó a los presentes “a estar del lado correcto de la historia”, lo que sea que eso signifique.
La molestia de los simpatizantes de Morena se dio precisamente en el sentido de que el “exprecandidato” Enríquez impugnó los resultados internos del partido, y a pesar de ello, Delgado aseguró que “para ellos es un capítulo cerrado”, y mencionó que están seguros de defender la decisión en los tribunales, cosa que molestó a los morenistas.
“Participaron en un proceso sin precedentes, con absoluta transparencia. Se abrió un registro libre, sabemos que siempre hay inconformidades, es normal como parte de estos procesos”, trató de explicar Mario mientras un tomate volaba por los aires.
No contentos con aventarle omelettes semi cocidos, las personas arrojaron piedras a la austera camioneta en la que Mario Delgado salió huyendo del lugar.
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CLONADAMENTE CIERTO
ENCHILADAMENTE REAL
DOLOROSAMENTE CIERTO
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