Hasta la campal se armó
Vitrina de trofeos desértica.- Parece que el pelearse por boletos será una tradición semanal, y ahora sucedió afuera del estadio Jalisco cuando se pusieron a la venta los tickets para la final del fútbol mexicano que disputarán las escuadras de Atlas y León.
Desde muy temprano pudieron observarse largas filas de personas económicamente activas formadas para conseguir un boleto para el juego de regreso que tendrá lugar el próximo domingo.
Y es que a pocos minutos de que la taquilla del estadio comenzara la venta de boletos, se pudieron observar imágenes de personas enfurecidas que incluso llegaron a los golpes cuando se dieron cuenta que no podrían conseguir entradas para la final (se entiende después de 70 años) por culpa de las sabandijas conocidas coloquialmente como “revendedores”.
Hubo problemas en la taquillas del Estadio Jalisco entre revendedores y gente molesta por la forma en que se está llevando acabo la venta ⚠️
Hay varios heridos y uno de los revendedores accionó un arma de fuego 💥
🎥 @Betto_Avalos pic.twitter.com/LqOvZaeDeL
— Multimedios Deportes (@mmdeportesmx) December 6, 2021
Al parecer los altercados fueron ocasionados por los revendedores quienes estaban acaparando los boletos, lo que causó irregularidades en la venta de los mismo y que pudo ser observado por los aficionados decentes, quienes al percatarse que éstos estaban agandállandose todos las entradas, pues iniciaron el zafarrancho.
Vamos por boletos para final, decía; ¿qué puede pasar?, decían
Fueron tan violentos los hecho que incluso se reportó que uno de los revendedores traía un arma de fuego que incluso accionó en contra de los aficionados, lesionando a varios.
❌ Pelea entre aficionados de Atlas y revendedores en las taquillas del estadio Jalisco.
La afición lleva horas formada sin poder adquirir boletos, mientras los revendedores ya los ofrecen a los alrededores a cantidades muy elevadas. pic.twitter.com/F6zykiUs1c
— SOMOS 12 (@12_somos) December 6, 2021
Lo hechos fueron reportados por la cadena Fox Sports, que desde muy temprano se dio cita a las afueras del estadio para monitorear precisamente la venta de los boletos para la “gran” final.
El espasmo de que haya todavía gente que le importe el fútbol mexicano es casi igual al hecho de que los revendedores estaban armados o que en los videos no vean policías presentes.