Lo increíble es que lo intentó
Extraño Mundo de Pascual.- Hubo una ocasión en la que un presidente mexicano tuvo la brillante idea de intentar cancelar en nuestro país la Navidad para celebrar en su lugar “el nacimiento de Quetzalcóatl”, y ya sabrán como le fue.
Y porque con esta publicación saldrán algunos “laicos”que dirán “¡ah, qué bien, no era mala idea cancelarla”, solo les diremos que la iniciativa fue de un presidente priísta siguiendo las órdenes del fundador del PRI. A ver si les sigue pareciendo tan buena idea. Proseguimos:
La ideota estuvo a cargo de Pascual Ortiz Rubio de quien decían que hasta le pedíaa Plutarco Elías Calles permiso para ir al baño, quien había sido el presidente anterior, y que controló a varios de sus sucesores, de ahí que al período le llamaron el “Maximato”. ¿No que tu tío Deforma no te ilustraba?
En la Navidad de 1930, Quetzalcóatl entregó los regalos. El presidente Pascual Ortiz Rubio pretendía así substituir al extranjerizante Santa Clos. Su atuendo fue más parecido a un viejito pascuero tropical que a la serpiente emplumada. No arraigó. Las tradiciones no se decretan. pic.twitter.com/xiaTQvZstS
— Carlos Peimbert (@carlospeimbert) December 11, 2019
Así las cosas, fue en la Navidad de 1930 que Ortíz Rubio (ya explicamos quién realmente) mandó por decreto prohibir imágenes de Santa Claus pues en su lugar los niños mexicanos celebrarían el nacimiento de la Serpiente Emplumada o Quetzalcóatl.
Incluso organizaron un desfile en el Estadio Nacional a donde invitaron a niños a ver el acto “navideño” protagonizado por el iracundo dios prehispánico, quien con su rostro lleno de paz abrazaría a los niños y los invitaría a que subieran a la pirámide (esto huele mal) para recibir un regalo.
#Sabíasque en la navidad de 1930 el presidente Pascual Ortiz Rubio decidió suplantar a los Reyes Magos y a Santa Claus por Quetzalcoatl? Se hizo un gran evento en el Estadio Nacional donde acudieron miles de niños a recibir su regalo de Quetzalcoatl y la primera dama pic.twitter.com/fZvNeod3dE
— Tlatoani_Cuauhtemoc (@Cuauhtemoc_1521) September 9, 2020
El decreto nunca aclaró si la enorme serpiente sería colocado en el pesebre de Belén o si los Reyes Magos la visitarían postrada en su nido, pero aún así, ese año el gobierno federal celebró la extraña efeméride.
La intención presidencial además de burlas, crispó los ánimos de la población mayoritariamente católica (en esos años casi llegaba al 95%), quienes veían en el decreto “nacionalista” de Ortiz Rubio un intentó comunista de quitar símbolos religiosos.
Cabe mencionar que durante el Porfiriato fue introducida la figura de “Papá Noel” o Santa Claus, que también causó revuelo pero que fue adoptado de manera más natural que la extraña serpiente.
Algunas marcas aprovecharon la situación para hacerse publicidad (y burlarse), como General Electric que anunció sus refrigeradores así: : “De los Magos, de Santa Claus o de Quetzalcóatl, no puede haber obsequio como este”.
El intento de cancelar la Navidad incluso fue impulsado por la SEP quien enviaron circulares en donde se divulgaba entre los estudiantes la leyenda del dios mexica.
"El día en que Quetzalcóatl se robó la navidad"
Aquel año el presidente Pascual Ortíz Rubio decretó la adopción de la figura del dios de Mesoamérica Quetzalcóatl como…
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— La Opinión de Poza Rica (@laopinionpr) June 5, 2018
