Paranoico pero cierto
Venezuela del Norte.- Después de varios días en ausencia de nuestro líder supremo cabecita de algodón, AMLO, el canoso mandatario salió en un video hace un par de horas para decir que sigue vivito y coleando, con poquitos síntomas pero nada de qué preocupar a los chairos o alegrar a los derechairos. AMLOrd agradeció a los mexicanos, al Creador, a la ciencia y al Deforma por ayudarlo con la recuperación de su salud.
Sin embargo, para no perder la costumbre, los nuevos chairos a.k.a. derechairos, agarraron vuelo con sus teorías conspiranoicas que ni Paty Navidad se atrevería a verbalizar. Muchos de ellos aseguraron que el video fue grabado en diciembre porque aparecen macetas con nochebuenas, otros aseguran que lo grabó justo el día que le confirmaron la enfermedad (sin evidencia alguna), otros juran que estaba a punto de desmayarse en el video y casi casi que el personaje en pantalla era un doble de AMLO. Basta con entrar a Twitter para encontarse con decenas de versiones más fumadas que Leon Larregui. Vaya, ni los chairos en su peor momento se aventaron explicaciones tan chaquetofantásticas.
Es 2021 y la oposición sigue sin aceptar que ya son más chairos que los chairos.
Publicado por El Chairomántico en Sábado, 30 de enero de 2021
Lo más criticable de sus extrañas teorías no es la imaginación empleada en cada una de ellas, sino la contradicción de sus mismas teorías 24 horas antes; es decir, los mismos que aseguraban que AMLO estaba gravemente enfermo, salieron a asegurar horas después que AMLO no estaba enfermo.
Es decir, resetean su cerebro cada 12 horas, no sabemos si al dormir se reinicia el cerebro como módem de Telmex, o de plano al peinarse le pican a algún botoncito en la cabeza durante 10 segundos y se resetean. Eso, o quizá los opositores tienen la capacidad de visualizar 10 realidades distintas del amloverse.
Los derechairos nunca pierden una.
Publicado por El Chairomántico en Sábado, 30 de enero de 2021
Sea como sea, ya sabemos que lo que pase mañana, según ellos, siempre fue advertido por sus profecías: Se les dijo chairos.