Porque oootra opinión de “Rompan Todo” es todo lo que necesitan
Toda Latinoamérica Unida.- Del mismo estudio/servicio de streaming que nos conmovió con Luis Miguel: La serie, nos sorprendió con Ya no estoy aquí y nos puso a roncar con Roma, llega Rompan Todo, mini serie documental producida por Gustavo Santaolalla, protagonizada por Gustavo Santaolalla y en la cual Gustavo Santaolalla y sus amigos nos cuentan su parcial, incompleta, sesgada pero aún así fascinante historia del Rock en Latinoamérica (y por Latinoamérica se refieren únicamente a México, Argentina, Chile, Colombia y Uruguay).
¿Y ese señor Santa Olalla quién es?
Hasta antes de enterarnos en Rompan Todo que descubrió a Beethoven, el pentagrama y el fuego, Santa Ayatola era más o menos conocido por producir perros discazos de rock durante los noventa, ganar dos Óscares y rifarse la música de Last of Us. Pero nunca sospechamos de su grandeza.
En el docu, Santa Olalla y un conjunto de señores setentones y chavorrucos recrean la evolución del rock en sus respectivos países, pero también sus proezas personales, pero también la represión de los gobiernos que los volvieron artistas rebeldes aunque luego se hicieran millonarios, se cansaran de hacer canciones de protesta y se vendieran a Netflix.
Estos son algunos momentos épicos que se pueden descubrir en este documental que ya rompió a la generación de concreto, pues no se mencionan bandas “vitales para nuestro rock” como La Barranca, Cecilia Toussaint, Rata Blanca, Héroes del Silencio ni al metal progresivo escandinavo.
1. Ahora resulta que el rock argentino es mejor que nuestro rock nacional, con nuestros Caifanes, nuestros Cafeta y nuestro Tri. Y pues sí, uno se entera que existieron artistas como Spinetta, Charly García, Sumo o Tanguito y desearía haber nacido en sur y estar comiendo bife de chorizo, che
2. Javier Bátiz descubrió a Carlos Santana, Rockdrigo González, Elvis Presley, Robert Johnson y a Jesús. Sólo le faltó descubrir al mismísimo Gustavo Santaolalla
3. A diferencia de lo que pensamos, Rubén de Café Tacuba no vive en un espacio ocupado en C.U ni en una comuna zapatista, sino en una casa muy fifí
4. En Rompan Todo intentan dignificar a Maná como grupo de rock, pero los muy groseros ponen el peor concierto para ilustrar su “grandeza”
5. Santaolalla inventó el rock mexicano al producir a Café Tacuba, Maldita Vecindad y Molotov, además de enseñarles a tocar, componer, cepillarse los dientes y cuidarse la barba
6. Sólo hay alguien casi tan grande que Gustavo Santaolalla y es Maná… no es cierto, es Gustavo Cerati, quien debe su nombre al Santa O
7. Resulta que Rockdrigo González sólo era un cantante chistosón y no uno de los grandes poetas mexicanos, como te aseguró tu primo el que no se baña
En resumen, es la historia que si no te chutaste en documentales del Canal Once, el Canal 22 y miles de revistas, ahora puedes conocerla contada en friega y a la Netflix. Destaca el trabajo del editor, quien logra hacer aún más inconexa una historia que ya lo era. Más monografía que relato, Rompan Todo logra lo imposible: unir a millennials y boomers en contra de un productor argentino.
Al final, es como ver seis horas del Flannagan, personaje de Héctor Suárez que llega a “romperlo todo” al grito de “Queremos Rooock”.
A pesar de eso, sentirás chido y tararearás las rolas cuando pasen “Las piedras rodando”, “Gimme the power” y… ya. Te enterarás de pasadita sobre algunas dictaduras latinoamericanas pero ni te imaginarás que fueron patrocinadas por el mismo capital que hoy produce esta serie.
Y bueno, el documental santaolallezco terminaría en el colmo de los lugares comunes, con Alex Lora gritando su consabido “Y que viva el roncarooooool”, de no ser porque cierra con la verdadera imagen del rock en la actualidad: un moribundo, genial y destruido Charly García diciendo lo único que se puede decir sobre el rock a estas alturas: SAY NO MORE.
Por cierto, no te pierdas los memes que nos dejó esta serie aquí.
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