Se acabó la 2ª temporada de The Mandalorian y te explicamos el glorioso final

Se acabó la 2ª temporada de The Mandalorian y te explicamos el glorioso final

por Adolfo Santino

¿Hay alguien que todavía no haya visto esta majestuosa serie?

Tumba de Ryan Johnson.- Llegó a su fin la segunda temporada de la serie de Star Wars “The Mandalorian” y es tal vez lo más glorioso que hemos visto desde el Episodio V: El Imperio Contraataca.

El final de temporada del Mandalorian es lo más grandioso de todo el año

Cuando parecía que la serie ya nos había sorprendido bastante y que había cumplido con rescatar a Star Wars del pantano de Dagobah a donde la llevaron las últimas películas, que llega Jon Favreau y Dave Filoni y nos dan un nuevo impulso de vida a los chavorrucos que crecimos con la Guerra de las Galaxias y que ya estábamos resignados a sólo darle a los videojuegos de la saga, pues era lo único decente que quedaba del universo.

Durante esta temporada vimos de cerca el recorrido de Din Djarin para entregar a Baby Yoda (Grogu) a sus congéneres, es decir, a algún Jedi que pudiera quedar vivo en el universo.

En los episodios anteriores, Mando, después de mucho peregrinar llevó al “Niño” al planeta Thyton, en donde “invocó” a un Jedi para que fuera a entrenarlo, pero sólo logró que los Dark Troopers de Moff Gideon lo secuestraran, y junto con Boba Fett (a quien trajeron de la muerte de manera majestuosa y justa) estuvo tratando de localizar la nave del poseedor del sable negro para recuperar a “Yodita”.

Aquí viene lo bueno: al dar con el crucero de Gideon, Mando en compañía de Bo Katan, Fennec Shand, Cara Dune y el mismo Fett, logran ingresar a la nave donde tienen a Grogu, pero no contaban con que ahí habría Dark Troopers al parecer ya con transfusiones de midiclorianos, lo que los hace prácticamente invencibles.

* CUIDADO, SIGUEN SPOILERS *

Tras una cruenta lucha para avanzar por la nave, y de una batalla épica entre Mando y Gideon, la tripulación queda atrapada en el puesto de mando del crucero, en espera de que los soldados de élite ingresen y acaben con ellos, y ahí es donde la magia y majestuosidad del creador de la serie se hace presente: son salvados por el jedi que Grogu invocó.

Había varias opciones, pues muchos creíamos que podría ser Galen Marek o Cal Kestis (personajes de los videojuegos Force Unleashed y Fallen Order, respectivamente) o incluso Ahsoka Tano podrían ser los que aparecerían, pero no, tras un épico y heroico ingreso a la nave, un misterioso Jedi da cuenta de todos los dark troopers con el sable láser y con cierta crueldad al hacer uso de la fuerza, tal y como siempre los fans de verdad pedíamos. Sí, los fans de verdad, dije. Se trata de Luke Skywalker quien salva a la tripulación.

Tras un patético desenlace de Luke en el episodio VIII (que la verdad ni me interesa saber cómo se llama) y de haberlo vilipendidado de manera grotesca desde el “Episodio VI: El regreso del jedi” cayendo por trampas hechas por boyscouts o aventando patadas voladoras, por fin alguien le hizo justicia al llamado “jedi legendario” al mostrarnos lo que realmente puede hacer.

El final no podría ser más glorioso, y hasta me atrevo a decir que la serie completa debió haber terminado ahí.

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