Ya, Diosito
México.- Como si no fuera bastante con el tema de la pandemia, la Madre Naturaleza envió un tornado en la entidad federativa Hidalgo hace apenas un par de días. ¿Pero qué hemos hecho para merecer tantos castigos divinos? ¿Aún los dioses siguen enojados por lo del Pasito Perrón? O sea, ya supérenlo.
La cuestión es que habitantes del estado de Hidalgo, en la zona metropolitana de Pachuca, y en los municipios de Zapotlán, Talcoyuca y Mineral de la Reforma, presenciaron una fuerte tormenta y granizada el fin de semana pasado. Esto produjo que se cayeran árboles y unos chicos granizotes llenaran las calles. Miren nomás qué cosas:
El tornado en tiempos del Covid
Por si fuera poco, habitantes de Tizayuca y el municipio de Zapotán de Juárez presenciaron un fenómeno meteorológico parecido a un tornado, lo cual alarmó a toda la población. Y, pues sí, la neta sí se ve re feo:
MÉXICO 🟥🌪️ | Tornado en Pachuca, Hidalgo
En la tarde de ayer, 18 de abril, un tornado sorprendió a los habitantes de Pachuca, Hidalgo. El granizo alcanzó el tamaño de un limón, los hechos ocurrieron el sábado. pic.twitter.com/wDFaEX65T7
— TormentasDelLitoral (@TDLtiempo) April 20, 2020
Por su parte, Enrique Padilla Hernández, encargado de la subsecretaría de Protección Civil del gobierno del estado de Hidalgo, comentó que este fenómeno se le conoce como nube embudo, la cual sólo podría convertirse en tornado si llegara tocar la tierra.
#VIDEO | La tarde de esta sábado, previo a la tormenta que ocurrió al sur de #Hidalgo, fue captado un #Tornado en el municipio de #Zapotlán.
Video tomado de: @merida7776 pic.twitter.com/Pzxic6XAhS— LSR Hidalgo (@LsrHidalgo) April 19, 2020
Y, a pesar de que el fenómeno se vio muy atemorizante, el subsecretario de Protección Civil de Hidalgo aseguró que esta especie de tornado es común en estos tiempos de lluvia. Asimismo, no se han reportado personas lesionadas.
Menos mal que no pasó a mayores. Pues está muy canijo vivir en un mundo donde Coronavirus, ovnis, hombres polilla, luces azules apareciendo en el cielo, líneas extraterrestres en las playas, e incluso misteriosos sacapuntas. Y agrégale un tornado, ¡ay, no!