O sea, que te puedes parar todos los días en los tacos y cuando mueras, harán una estatua de ti
Valle Chuletón.- La mejor cliente de una carnicería ha fallecido, y el dueño del lugar le ha hecho un homenaje para no olvidar todas las veces en que con su hambre llegaba a su local, y se paraba para ordenar lo que iba a comer ese día.
Se trata de una gatita, que diligentemente se presentaba día a día en una carnicería en Turquía, la cual era muy querida por el encargado, quien le entregaba un pedazo de carne que era devorada por la felina con avidez, retirándose del lugar hasta el día siguiente en que volvía a entrar a la misma hora, rutina que duró por años.
Al morir la gatita, el carnicero decidió enterrarla en su jardín y colocar una pequeña réplica en el lugar donde siempre se paraba frente al mostrador para que quedará inmortalizada su figura dentro del paraíso vegano.
“Este carnicero le daba de comer todos los días a esta gatita callejera, la gatita murió y él le hizo una replica en la misma posición y también le hizo una pequeña tumba”, compartió un usuario la historia en el grupo ‘Gatolicismo‘, haciéndose rápidamente viral.
Alguien grabó la forma en cómo la gatita entraba al lugar para pedir de comer, cosa que se repitió por mucho tiempo hasta que dejó de existir:
Junto a la lápida, el carnicero colocó el epitafio con más cariño del que le dedicó a su suegra:
“Jade, la gata conocida en todo el mundo, descansa en paz aquí”.