Polanco.- Peritos que investigaban el sustazo que se llevó Pepillo Origel anoche, revelaron que el caso ha dado un sorprendente giro de eventos. Al parecer, la balacera que ocurrió en Parque Lincoln jamás existió y sólo eran unos juniors corriendo autos.
Anoche, una supuesta balacera se dio en Polanco mientras Pepillo Origel paseaba a sus “niños” (eran perrhijos). Afortunadamente, él ya puede dejar su dieta de “Bolillos para el susto”, luego de que el Departamento de Policía de la CDMX cerraran el caso.
Según los peritos, ningún casquillo de bala fue encontrado en los alrededores, pero sí había marcas de derrapes en el pavimento. Al revisar las cámaras de seguridad encontraron que el balazo eran los escapes de coches echando arrancones.
Los estudiantes de la Anáhuac, Santi y Rodri estaban probando las nuevas Caribe que modificaron. Sus papás ya pagaron las fianzas, les prohibieron correr autos en Polanco porque asustan a la gente de la tercera edad y les rentarán el Autódromo Hermanos Rodríguez.
Por cualquier duda, la policía de la ciudad compartió en sus redes sociales el siguiente video que demuestra que el ruidarajo de los escapes se puede confundir con balazos:
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CLONADAMENTE CIERTO
ENCHILADAMENTE REAL
DOLOROSAMENTE CIERTO
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