Quizá hasta nos paguen, muchachos, ánimo
Campo de algodón.- Se respira un aire nuevo para nosotros, los becarios. Jóvenes egresados de carreras de sociales y humanidades listos para el mundo laboral. Oyeron, muchachos, éste año sí nos van a pagar. Ya podré volver a mi tierra allá en mi Fresnillo, Zacatecas, ah, mi pachamama ya la extraño.
Un día llegamos por casualidad a esta tierra conocida como El Deforma. Compartimos grandes momentos en compañía de Don Potasio y Daniel Castillo, los fundadores del medio más irreverente del país. No olvidaremos las risas de Maestro Bergstrom ni las promesas de cientos de cheques. Hoy todo va a cambiar, hoy nos van a pagar.
Recuerdo cuando conocí al Púas, en ese entonces todavía era el mejor jugador de baloncesto. Los tiempos ya no son como antes, Charles, hace dos semanas que compraron al primer robot becario, éste sí viene con chistes incluidos. Aún recuerdo a Aremi la de la tanda. ella fue la que colocó el LSD dentro del garrafón de la oficina.
Ya se hace tarde para ir a las pizzas de Don Fercho, hora de la última nota del día.
