No vives de ensalada
Azotea verde.- Todos tenemos un conocido al que le debemos decir por lo menos una vez al día “sí, sí, ya te vimos, muy bonito” para que su identidad vegetariana o vegana no se vea vulnerada y no se sienta incomprendido. Pues también habría que aprovechar y decirle que su veganismo le podría ocasionar un accidente cerebrovascular.
Y no lo decimos nosotros, lo dice la ciencia. Según una investigación publicada en el British Medical Journal hubo un porcentaje mayor de veganos con accidentes cerebrovasculares, que de personas que consumían carne.
La investigación estuvo muy atascada y tardó casi veinte años en llevarse a cabo, pues a los participantes primero los entrevistaron en 2001, después de 2010 y una vez más recientemente. Ah, por cierto, los involucrados fueron ¡48 mil personas!
La cuestión es que los veganos y vegetarianos tuvieron tres casos más, por cada mil personas de accidentes cerebrovasculares, en comparación con los que sí comían carne. O sea que si 4 personas tenían problemas de ese tipo, 3 eran veganas.
Pero no canten victoria, carnívoros que se alimentan del sufrimiento animal, pues la investigación también dijo que los veganos tienen menos posibilidad de sufrir una enfermedad coronaria. Esto significa que ser vegano te afecta en el cerebro, pero te ayuda en el corazón; mientras que comer carne es a la inversa. Una cosa por otra.
De las 48 mil personas, 2’820 presentaron casos de enfermedades coronarias, mientras que 1’072 accidentes cerebrovasculares. Sin embargo, la investigación sólo fue un sondeo general, por lo que todo depende de cada individuo y sus hábitos alimenticios particulares.
Los expertos señalaron que lo importante es tener una alimentación balanceada, pues también si le entras bien duro a las carnitas seguramente no te va a dar algo en el cerebro, pero igual te puedes patatear de un infarto. Ponte buzo caperuzo.
