A más de uno se le antojaron
Washington D.C.- Luego de que Donald Trump lanzara amenaza de aranceles contra México, Marcelo Ebrard y el equipo de comunicación social de la Secretaría de Relaciones Exteriores, decidieron partir rumbo a gringolandia para reunirse con la delegación estadounidense y hablar sobre el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá.
Fue en una de estas reuniones en Washington DC, en donde Roberto Velasco Álvarez, o como ahora lo conocemos, Lord Cacahuates, saltó a la fama por echarse unos cacahuatitos en lugar de ponerse a tomar nota.
La líder de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, recibió a la delegación mexicana en Washington, D.C. Sostuvimos una excelente conversación sobre la ratificación del #TMEC. pic.twitter.com/8naRuTjB1g
— Graciela Márquez Colín (@GMarquezColin) June 4, 2019
Como buena rucamillennial, Graciela Márquez Colín compartió un par de fotos de la reunión en su cuenta de Twitter, y en ella se puede observar que mientras todos están atentos al tema de la junta, Roberto Velasco Álvarez se está desayunando unos cacahuates como si estuviera en un partido de futbol amateur.
¡ÉNTRELE!
Afortunadamente, Roberto Velasco también es un rucomillennial y tomó las observaciones de la gente con humor, explicándole a sus seguidores lo ocurrido:
Aprecio todos sus comentarios y memes sobre la famosa colación (y chocolates, que no salieron en la foto), que generosamente nos ofreció la Sra. Pelosi en medio de un intenso día de trabajo. Buenas puntadas. En lo sustantivo: buen ánimo para alcanzar acuerdos. Mañana seguimos.
— Roberto Velasco Álvarez (@r_velascoa) June 5, 2019
Sin importarle que se encontraba con las personas más fifís que pueden existir en el planeta, Roberto Velasco decidió cerrar su libreta, en la que supuestamente toma notas, para sacar una servilleta y colocarla en la mesa a manera de plato, para poner ahí los cacahuates que la señora Pelosi le ofreció momentos antes, y pues qué grosero hubiera sido si se los niega.
Como sea, sabemos que a más de uno en esa reunión se le antojaron los cacahuates.
Seguiremos informando, Joaquín… Sabina.
