O, si no, que los abuelos reciban dinero por cuidarlos
México.- Un grupo de millennials ofendidos, deconstruidos, internetizados y frágiles se manifestó a las afueras de Palacio Nacional, en el marco de la mañanera de AMLO, para exigirle al presidente que no ignore a los perrijos, gatijos, e incluso lagartijos, y asegure que habrá estancias infantiles para estas bendiciones.
“Me parece tóxico y ofensivo que el presidente sólo centre su atención en les hijes humanes, debería dejar de romantizar el cuidado de les niñes humanes y enfocarse en las otras familias poco tradicionales que también necesitan apoyo y amor”, sentenció Violeta Gómez, indignada millennial y madre de tres bendiciones perrunas.
Los jóvenes encolerizados exigieron que el gobierno de México ofrezca una disculpa pública por olvidar a los lomitos y gatitos de sus programas sociales. Señalaron que estas inofensivas bendiciones caninas y felinas deberían tener los mismos derechos que cualquier chamaquito del país.
Asimismo, pidieron al gobierno que destine una parte del presupuesto a los abuelos de los perrijos y gatijos, o sea, a los padres de los millennials, para que ellos se hagan cargo del cuidado de estas criaturas y ganen un poco de dinero por tan difícil y cuidadosa labor.
“Milaneso es como el Borras de la película: fabrica mucha popó, y mi pobre jefecita es la que se encarga de limpiar todo, así que merece una paga justa y digna”, concluyó Diego, joven de 24 años y padre de Milaneso, un perrito de raza única, siempre abrazable nunca inabrazable.