“Hay va la chilanga banda, chin chin si me la recuerdan”, comentó
Cedemex.- Ya chole chango chilango con tu racismo hacia la Caravana Migrante, en la cual vienen niños y madres luchonas escapando de un gobierno más corrupto y absurdo que el de México, en donde les es imposible encontrar la seguridad que necesitan para vivir.
Como el caso de Rubena Albarrán, una mujer hondureña, feminista y compositora amateur que viaja con los inmigrantes centroamericanos en busca del sueño chilango, el cual no está resultando como ella esperaba pero aún así está feliz de que ya se encuentra pisando la tierra de los aztecas.
Todas las historias de cualquier integrante de la Caravana Migrante son muy tristes, y la de Rubena no es la excepción. Ella tuvo que escapar de un hombre que la obligó a ser su esposa y que no la dejaba tocar la guitarra ni cantar, ya que lo hacía muy mal, pero eso no justifica la acción de este cerdo machista.
Después de eso se enteró de que en la ciudad de México los chilangos pueden tocar su música en las calles y en el transporte público, molestando a la gente que viaja tranquilamente siempre y cuando grites muy fuerte y desafinado.
Entonces esta mujer luchona decidió emprender el viaje y se unió a la Caravana Migrante, en donde no dudó en acompañar la travesía de los centroamericanos con sus canciones, como la de ‘Eres’ o la de ‘El baile y el salón’; la de ‘Ingrata’ ya no la toca porque los inmigrantes millennials se ofenden.
“Rubena siempre pone de buen humor a todos en La Bestia cuando se pone a tocar, y luego yo me uno a ella creando un momento mágico inmigrante”, expresó Momo, un guitarrista amateur venezolano.
▶ Rubén Albarrán prendió una sábila por los integrantes de la #CaravanaMigrante https://t.co/gmqFMYqsPQ pic.twitter.com/tfKG8sg5K7
— Milenio (@Milenio) November 7, 2018
“No me imagine que los mexicanos recibieran tan bien mi música, en cuanto empecé a cantar todos sacaron su celular y comenzaron a tomarme fotos”, dijo Rubena para el reportero especial de El Deforma.
Por su parte, Enrique Peña Nieto comentó: “No cabe duda de que estas son las historias que vale la pena contar, las que transmiten esperanza a la humanidad ante este caos y espectáculo que son los migrantes hondureños”.