Háblale a Elías que ya llegó la party
Metalandia.- Si alguna vez llegaste a pisar el desaparecido Bulldog Café, y te lo decimos desde una perspectiva muy chavorruquística, recordarás que estaba atascado de gente ebria que bebía sin parar de las mieles de una barra libre, mientras cantaba con alegría “Persiana Americana” y “Enter Sandman” de Metallica.
Bueno, estos mismos pseudo roqueros/metaleros ya envejecieron, al igual que los ídolos que alguna vez agitaron la melena al ritmo de su cantar.
Actualmente, Metallica se encuentra de gira, probablemente con Pandora, yendo de pueblo en pueblo rezando su despedida para jamás retirarse.
A pesar de ser una de las bandas exponentes del metal fresón en todo el mundo, Metallica no encuentra cómo pagar la totalidad de sus impuestos únicamente con giras y discos pedorros. Fue entonces que dijeron, “bueno, ¿qué otra cosa les mama a nuestros fans?“, pues el chupe.
Gracias a esta idea, decidieron sacar un whisky llamado “Blackened American Whiskey” porque pinshis rudos alv son bien malotes todo negro ay qué miedo.
Si creías que esta agrupación actuaría como asquerosos conformistas, estás muy equivocado, ya que su delicioso licor para empedar cualquirilla, sino que fue fabricado bajo estrictos rezos metaleros que modifican su sabor molecularmente, así como el agua bendita.
Claro que con rezos en realidad queremos decir un bocinón o subwoofer que genera ondas de sonido de bajo hercio tan intensas que no solo mueven tu corazón, sino los componentes del whisky.
Así que ya sabes, llámale a tus amigos mirreyes que gastan en playeras de Metallica porque escucharon “Master of Puppets” en Guitar Hero y se dicen fans del rock, para echar la copilla y no sé, que te ayude a viajar por el mundo como Luis Miguel con Palazuelos.
Es broma, ningún mirrey que sea invitado es metalero, a fuerza deben llevar Polo rosa, si no la lleva, no le hables.