Ya te empiezan a decir que no les alcanza
Meméxico – Hoy en día los jóvenes somos juzgados no sólo por nuestra fragilidad económica y poca madurez emocional, sino también por atarnos con todas nuestras fuerzas a las comodidades y sopita caliente que nos ofrece el núcleo familiar.
Cuando nuestros padres y abuelos tenían más o menos unos 25 años ya vivían en una casa propia, tenían hijos y hasta granja con perritos, por lo que su urgencia para que abras tus alas y dejes el nido aumentan cada vez más y más.
Además de lo anterior, pues ya andas chavorruqueando y sigues jugando que el Pokémon Go y viendo animé, lo que obviamente los tiene muy a disgusto y ya no saben cómo alejarte de sus vidas ni de su dinero, viejo gorrón.
Esta pequeña pero contundente lista te ayudará a identificar aquellas señales que tienen una razón más profunda de ser.
1. Es la tercera vez que te cambian la chapa de la puerta
2. Tu cuarto se va convirtiendo poco a poco en una bodega
3. Disfrazan de halago sus comentarios sobre lo capaz que eres de tener dinero y cuidarte solo
4. Ya no te sirven de comer
5. Tiraron tu ropa por la ventana
6. Te enseñan departamentos en renta
7. Constantemente te dicen que a tu edad ellos ya tenían casa y familia
8. Te comparan con tu hermano menor, el independiente
9. Hacen de comer lo exacto para todos los miembros de la casa menos tú, o lo peor… el hígado encebollado que detestas una o dos veces a la semana
10. Fingen enojarse por todo para que te hartes y los dejes (al fin)
11. Tu mamá te dice sutilmente entre lágrimas “por favor hijo, ya vete, ya no te aguantamos”
Si por alguna razón te sentiste identificado con al menos uno de nuestros puntos, significa que tus papás ya no quieren que vuelvas de la peda a su casa, anhelan que trabajes, que tengas pareja que salgas embarazada o que huyas con alguien, ¡pero que los dejes vivir sus vidas sin ti!
