AMLO rompió el corazoncito de Gael García y los derechairos se lo comieron vivo

AMLO rompió el corazoncito de Gael García y los derechairos se lo comieron vivo

por Redacción

Encontronazos políticos y Gael García, hoy en Twitter

Chairópolis.- No pasa un día en este hermoso país sin que la gente esté constantemente peleando, a favor o en contra de AMLO, da lo mismo, el tema enciende a los “mechas corta” más que un debate sobre qué salsa le va mejor a los tacos al pastor. ¡Obvio la verde!

Hoy le tocó al único Bichir que se salvó de no ser un Bichir: Gael García Bernal. No solo se enchairó la Belinda, también este grupo de actores que vieron en nuestro presidente cabecita de nube un cambio verdadero, mismo que estuvieron mame y mame durante semanas de manera “imparcial”.

Para aquellos que no recuerden (o que ni siquiera hayan nacido), en esa fecha mencionada por el soñador Gael, se llevaron a cabo las elecciones presidenciales donde se acusaba (otra vez) a la entonces Comisión Federal Electoral de fraude.

¿Y quién ganó?, pues el PRI, quién más, con el mismísimo líder y fundador de la Mafia del Poder, Carlos Salinas de Gortari.

El principal responsable y encargado de dar fe y legalidad a esas fraudulentas elecciones fue Manuel Bartlett, dulce viejecito que, al parecer, siempre se encontrará a la izquierda del padre.

Así es, indignadísimos chairo-chavos, este hombre, priísta hasta el último orificio del cuerpo, fue seleccionado por Morena (y para ser más intrigosos, por el mismo AMLO en persona) para convertirse en el próximo dirigente de la Comisión Federal de Electricidad, en esta nuestra fabulosa República Amorosa Mexicana.

¿Y Gael qué vela tiene en este entierro? 

Uy… pues la ira masiva de los anti-amlo que arrancaron su hermoso vestido chairo pedazo por pedazo, hasta dejarlo inmóvil e indefenso en el suelo.

Por eso dicen que nunca debes conocer a tus héroes, mucho menos hacerlos presidentes.

Fue entonces que la derechairiza proyectó todas sus frustraciones sobre el actor, pues porque ahí estaba, mírenlo, lleno de esperanza y ¡ándele!, lo traicionaron.

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Al final del día, hermanos mexicanos, todos son políticos y si pudieran te comerían a ti y a todos tus seres queridos; y si uno te muerde y te contagia esa sed de sangre, también terminarías dando chapulinazos.

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