Mientras unos barrían el aburrimiento tú barrías la casa
México.- Las vacaciones de verano se encuentran en pleno apogeo y con ello miles de niños que han perdido su título de “bendición” por sus atormentados padres que ahora esperan el regreso a clases o la eutanasia.
Pero esa bella época del año fue bien valorada por todos en nuestra infancia, aunque lamentablemente no era como nos la pintaban las películas gringas, llenas de diversión y aventura sino como una película de la posguerra italiana, con desesperanza y miseria.
A continuación te presentamos estas situaciones que seguramente viviste si llegaste a estudiar en una escuela de gobierno y sobreviviste en el intento:
1. En lugar de baile romántico de fin de año terminabas bailando la “Danza de los viejitos” o “Palomitas de maíz”
2. Cuando sonaba el timbre de fin de curso no podías aventar tus útiles porque tu mamá te agarraba a chanclazos ya que se los tenías que heredar a tus hermanos menores o reutilizarlos al año siguiente
3. En lugar de un viaje instrospectivo con tus amigos, se firmaban el uniforme cuando salían de la primaria… para nunca volverse a ver
4. Soñabas con ir a un campamento de verano pero terminabas en un curso de la delegación haciendo manualidades pedorras
5. Creías que esta sería la ocasión perfecta para conocer el mar espumoso, pero la única espuma que conocías era la de la cubeta del trapeador al limpiar la casa
6. En lugar de vivir aventuras y resolver misterios domésticos te la pasabas en las canchas más cercanas esperando la reta de futbol y cuidándote de los drogadictos
7. Pensabas que conocerías a tu amor de verano pero te la pasabas viendo novelas con tu mamá
8. En lugar de iniciar un puesto de limonadas le llevabas las caguamas a tu tío borracho y te quedabas con el cambio
9. En lugar de Disneylandia o Six Flags o mínimo la Feria de Chapultepec, tus jefes te llevaban a la feria patronal para que sólo te subieras a tres juegos mecánicos, incluido el juego que el año pasado le arrebató el brazo a tu hermano menor
10. No había viajes en casas rodantes, pero sí mucha diversión en un picnic en el Bosque de Chapultepec, donde tus papás llevaban comida incluso para alimentar a los patos y a uno que otro vagabundo que se acercaba por un taco o por tu virginidad
11. En lugar de museos o atracciones turísticas, los únicos lugares que visitabas eran el mercado, la casa de las amigas de tu mamá, los separos para sacar a tu papá y la papelería, donde el dependiente rechazaba los vales del gobierno para útiles escolares
12. Pero no todo era malo, también existía el chocomilk con plátano
