Es que no era amarilla pero tampoco penal
México.- La selección nacional se encuentra disputando su pase a los octavos de final de Rusia 2018 ante la selección de Suecia, que se le ha complicado a los mexicanos en el primer tiempo, gracias al arbitraje.
Durante los primeros minutos el árbitro marcó una exagerada tarjeta amarilla a Jesús Gallardo y una falta inexistente a Guillermo Ochoa, lo que ocasionó jugadas peligrosas ante el marco azteca que Ochoa supo detener.
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¡Mugroso árbitro vendido!
Por otro lado, el ‘Chicharito’ Hernández cometió una mano dentro del área que significaba un penal a Favor de Suecia, pero ni el árbitro ni el VAR consideraron que fuera penal, ante la indignación del técnico sueco.
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¡Bien hecho, no era penal!
Ahora los mexicanos no saben si odiar el desempeño del árbitro Néstor Pitana por las faltas que pudieron haber terminado en gol o amarlo por no marcarles un posible penal en contra. Así que no queda más que esperar el resultado final para que el público mexicano emita su veredicto.