Hay talento, sólo falta apoyarlo
México.- El algodonero que se volvió viral gracias a unas fotografías en donde aparece confundido y lleno de caramelo en toda su ropa, ahora volvió aparecer en escena con un cambio radical.
Este personaje cuyo nombre desconocemos, trabaja vendiendo algodones de azúcar en la plaza de armas de la ciudad de Durango, aunque pocos le auguraban un futuro en la industria.
Después de todas las bromas que se hicieron en redes sociales sobre la lamentable ejecución de sus habilidades algodoneras, parece que este buen hombre superó sus problemas y ahora luce irreconocible.
O al menos reconocible, ya que ahora puede hacer algodones de azúcar sin quedar todo embarrado en el intento. Una muestra más de que nadie nace sabiendo todo y que el esfuerzo y la dedicación son la clave para cumplir todas las metas.