¿A dónde vamos a parar?
En algún lugar de un gran país.- Una publicación del gran mar de Facebook llegó a nuestro Departamento de Cuidados Emocionales por los Infantes. Sin fecha exacta o lugar que demarque su procedencia, la siguiente imagen hizo un ruido lejano que cimbró un pequeño destello en el universo de cosas chibis del Internet.
Una señora, presuntamente abuelita, encamina a “su pequeño” en apuros, que va subido en un triciclo, rumbo a los caminos de la vida; en realidad los caminos de la vida son un puente con una inclinación de 65 grados y su pequeño no es un bebé humano, es un suave peyito del que aún no tenemos el placer de conocer su nombre.
Como medio de entretenimiento con cierto rigor periodístico (proveniente de uno de los tantos becarios que estudiaron comunicación y ahora son esclavos) nos hicimos muchas preguntas respecto al bello fotoensayo que nos acompaña este día: