México.- El Enmascarado de Plata cumple cien añotes y muchos quieren ver sus películas una y otra vez. Algún homenaje no estaría mal, pues cualquiera que haya visto alguna escena donde El Santo se avienta tiros con seres truculentos, como las momias, puede asegurar que este gran luchador se lleva de calle a cualquier súper-heroecito de Marvel.
Cuando los admiradores del Santo fueron a la Cineteca Nacional a ver si ya había algún homenaje para el gladiador mexicano, se dieron cuenta de que eso no era posible. “Uy, cómo crees, o sea, goe, eso es medio naquito, ¿no? Es cultura popular, mainstream, kitsch, nada complejo ni crudovegano”, más o menos fue lo que dijo Alejandro Pelayo, el refinadísimo y culto director de la Cineteca Nacional.
Es que el señor, de paladar exigente y monóculo de piedra fina, no se permitirá proyectar ninguna película del Santo en la emblemática Cineteca Nacional, pues ese espacio no puede desperdiciarse con un enmascarado de la cultura popular, cuando hay películas de Godard, Tarkovski, Kurosawa o Von Stroheim que exigen ser vistas.
“A mí nunca me gustaron las películas del Santo, pues yo desde los tres años veo filmes de Godard y Tarkovski, en su idioma original, por supuesto; además su capa es muy naca, casi parece traje con lentejuelas de Juan Gabriel”, más o menos expresó Pelayo.
Por su parte, algunos admiradores del Santo piensan doblar alguna de sus películas al checo o al ruso y decirle al director Pelayo que acaban de descubrir un “film de autor” donde se simula a un luchador del folklore mexicano, el cual combate a zombis antes de que los zombis fueran mainstream, “quizás el director se vaya con la finta y decida proyectar así una de esas películas”, dijeron.
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