“Pásenle, acá tenemos varias”
Pradera de la Analogía Cultural.- Oficinas de Ministerios Públicos y Oficinas Periciales abrirán estos días hasta tarde para recibir a los niños que “pidan su calaverita”, según lo anunció el Fiscal General, quién acaba de llegar de Francia donde recibió su quinta capacitación en lo que va del mes.
La determinación oportuna se da luego del extraño fenómeno que se daba en años pasados, en donde cientos de niños salían a las calles pidiendo un cuerpo en descomposición, cosa que confundía a las personas quienes sólo tenían dulces para dar.
“Yo doy dulces, y los doy el 31 de octubre. 1 y 2 de noviembre, es para ir al panteón. No sé por qué mezclan las cosas“, sentenció Pragmático Díaz, hombre anti globalista, tecnócrata, chimuelo de la localidad y fabricante artesanal de sartenes forrados de aluminio a prueba de robo de ideas.
Los burócratas judiciales estarán listos para recibir a los niños cuando entonen su pegajoso estribillo, el cual les será contribuido con fotos de necropsias.
Los ayuntamientos aprovecharán el extraño interés de los menores por lo relacionado con la ultratumba, para ampliar los horarios de las historias que se cuentan en los panteones municipales, en donde habrá tours exclusivos para niños en busca de su “calaverita”.
La tendencia ha ido a la alza, e incluso ya ha pasado más allá de nuestras fronteras.
Según nos informaron nuestros colegas pecosos, en al menos 8 estados de la Unión Americana se ha podido ver a niños pidiendo la dichosa “calaverita” en un castellano mal hablado, aunque allá se les dé dulces a cambio.