¡Denles un Nobel, Oscar, Pullitzer o lo que sea pero ya!
¿Qué no hacen los chinos? Pueden convertir a pequeños niños en grandes atletas mientras, al mismo tiempo, están fabricando ese iPhone con el que lees esta nota. Parecen ser seres con un potencial ilimitado y quizá lo sean, al grado que un grupo de científicos de aquel lado del mundo está maquilando lo que muy probablemente sea el mayor regalo a la humanidad: el cerdo bajo en grasa.
Así es, tú que te comes nueve tacos pero te sientes culpable de comerte el tocino, o bien, si simplemente ya te diste cuenta que el tocino de pavo es una bazofia (porque hemos oído muchas bazofias, pero esa es la mayor bazofia de todas), ahora podrás consumir un tocino con hasta 24 porciento menos de grasa desde el empaque original (o sea del puerquito).
Y es que gracias a este estudio, que implica complicados métodos científicos para alterar la temperatura de sus cuerpos (que ni los del Politécnico comprenderían y que no desperdiciaremos tiempo en explicarlos), el cerdo resultante (y todas sus deliciosas partes de donde también viene el gran taco al pastor) será tan fitness que seguramente hará regresar a varios vegetarianos al camino que nuestro Dios nos indicó:
“Al desembarcar, El vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, PORQUE ERAN COMO OVEJAS (vegetarianos por moda) SIN PASTOR; y comenzó a enseñarles muchas cosas.” Marcos 6:34
Y asímismo como la biblia nos lo dice, este regalo para la humanidad supera por mucho a todos esos pseudocientíficos que investigan el universo, las ondas magnéticas y las propiedades del nopal, cosas que nunca nos servirán ni nos ayudarán a ser felices, por lo que exigimos el Nobel de la Paz a estos parientes de Osorio Chong.
