¡Aprende algo!
Del otro lado del muro.- Todos conocemos el viejo relato inglés de Robin Hood, un joven justiciero que robaba el dinero de los más ricos para beneficiar a los más pobres, y aunque la neta nadie sabe si existió realmente o si era un político en campaña, su leyenda ha perdurado tanto que en alguna medida todos queremos conocer a algún mecenas que nos ayude a salir de nuestra miseria godín, he ahí el éxito de los SugarDaddys.
Sin embargo un peludo héroe ha hecho su aparición en Oklahoma, Estados Unidos, ya que un gato llamado Sir Whines, se volvió la sensación del pueblo de Tulsa por robar dinero a los transeúntes por las noches para amanecer con su botín en la agencia de marketing donde vive.
Y es que si ya vas a ser asaltado qué mejor que sea por un lindo gato y no por un Brayan cualquiera encima de una Italika, ¿verdad? Además, el tierno minino entrega su dinero integro a su dueño quien a su vez ha decidido donar todo lo recaudado a una organización que ayuda a personas sin hogar, vagos pues.
Sir Whines comenzó a hurtar como un juego ya que su dueño piensa que algunas personas intentaron jugar con él con lo primero que encontraron en sus bolsillos y, como dirían los priistas, luego de saber lo que es el dinero sólo quiso obtener más.
Esta situación se ha vuelto una sensación en aquel lugar de un gran país donde olvidaron construir un lugar donde queme el sol y al nacer no haya que morir.
Fuentes brotantes de El Deforma afirman que este modelo de robo con amor gatuno está comenzando a ser replicado por algunas células delictivas en México, las cuales están viendo la rentabilidad de entrenar gatos para hacer lo mismo en lugar de subirse al camión a amenazar gente o, peor aún, vender mazapanes que a nadie le gustan.
